Bienvenido de nuevo a esta sección, donde el misterio y el ocultismo están más presente que nunca. En esta nueva entrega, vamos a meternos de lleno en la obra, considerada por muchos, el gran libro de hechizos y exorcismo. En esta ocasión, haremos un viaje a las entrañas de El Tesoro del Hechicero, también llamado «El Ciprianillo».
Antes de continuar, te recomiendo que conozcas un poco al autor de este libro. Hace unas semanas te conté la Historia de San Cripriano, el rompemaldiciones. Una misteriosa y apasionante historia.
El Tesoro del Hechicero
Este libro, lleva dentro de si, otros tres pequeños libros más. Pronto, iremos viendo como, a medida que avanza la lectura, conoceremos quien es el Ser o Espíritu Supremo, Los Espíritus Superiores y los Espíritus Celestes.
En la primera parte de este libro, nos narra la vida de San Cipriano, las jerarquias celestiales e infernales, además de los grandes talismanes de protección. En esta ocasión, vamos a conocer quiénes son los grandes Espíritus Celestes.
El autor, denomina a esta parte, «La Jerarquía de los Espíritus», la cual vamos a ver a continuación.
El Ser Supremo
«Prefiero equivocarme creyendo en un Dios que no existe, que equivocarme no creyendo en un Dios que existe. Porque si después no hay nada, evidentemente nunca lo sabré, cuando me hunda en la nada eterna; pero si hay algo, si hay Alguien, tendré que dar cuenta de mi actitud de rechazo.»
Blaise Pascal.
Es el Espíritu Supremo, creador de todo lo existente. Nadie, ni nada, tiene control sobre ÉL. Se le debe respeto, sumisión y obediencia.
Los Espíritus Superiores
Los espíritus superiores son aquellos que se consideran los primeros en su categoría y que tienen, por lo tanto, la potestad de mandar sobre los que se hayan en una escala inferior. A continuación los vamos a conocer.
“Para los espíritus, y, sobre todo, para los superiores, la idea lo es todo, y nada.”
Allan Kardec
- Adonay: Es el ángel protector de la Luz Divina.
- Elohim y Jehovam: Son los encargados de cumplir los mandatos de Adonay y de cumplir con su ejecución.
- Mitratón, Azraél, Astroschio, Eloy, Milech, Ariel y Zenaoth: Estos son los encargados de hacer cumplir las órdenes que son transmitidas por el Ser Supremo, Adonay, Elohim y Jehovam, y que además, para realizar dichas tareas, poseen un gran número de espíritus que les rinden obediencia absoluta.
Los espíritus celestes
Los espíritus celestes son los que habitan en los astros y cuerpos celestes. Sus funciones son, las de presidir el destino de cada mortal y dirigir los acontecimientos que les conciernen, conforme a la voluntad del Ser Supremo. Por este motivo, están al abrigo de sufrir ataques de los seres oscuros.
“Lo que es creado por el espíritu es más vivo que la materia.”
Baudelaire.
Hay siete gobernantes que tienen funciones diferentes y que vamos a ver a continuación:
- Aratrón: Tiene el poder de cambiar instantáneamente en piedras o metales, objetos diferentes y al contrario. Enseña la alquimia, y la física. Hace invisible a los seres y da larga vida.
- Betór: Confiere las altas dignidades acerca de los hombres a los espíritus que les dan respuestas exactas, transporta los objetos de un lugar a otro y proporciona piedras preciosas.
- Phaleg: Pertenece a los atributos de Marte, establece la paz y eleva a las altas jerarquías militares a quienes han recibido su marca.
- Och: Preside a los atributos del Sol, da larga vida y salud. Distribuye la sabiduría, enseña medicina y da poder de cambiarlo todo en oro puro.
- Hageth: Bajo la influencia de Venus, da hermosura a las mujeres, a las cuales, da su protección, les distribuye todas las gracias. Cambia el cobre en oro y viceversa.
- Ophiel: Posee el poder de la transmutación metálica, hasta el astro Mercurio, da el medio de transformar la plata en oro. Transformación que se funda, según la alquimia, en la Piedra Filosofal.
- Phul: Gobierna las regiones lunares. Su potencia se extiende a la curación de infinitas enfermedades, cambia todos los metales en plata, protege al hombre que navega y da larga y poderosa vida.
¿Sabías que a día de hoy, siguen latentes estas tres grandes jerarquías?
“Nunca debemos atribuir ninguna forma física ni a Dios ni a los mundos espirituales.”
RABINO NAJMAN DE BRESLOV
Como habrás podido leer, El Tesoro del Hechicero (Primera Parte), nos transporta a una época llena de misterios, donde la alquimia, por ejemplo, era considerada una de las artes mas supremas que existían. Y, por esa razón, el autor decidió, después de muchas investigaciones, regalarnos estos conocimientos.
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